1 CORINTIOS 13
ACTUALIZADO
1.Aunque hable cinco idiomas y tenga tantos conocimientos que
pueda hablar de innumerables temas, si no tengo suficiente amor para no contar chismes ni
menospreciar a otros, no solo soy mucho ruido y pocas nueces, sino una persona
destructiva.
2 Y aunque lea mucho la Biblia y me sepa partes de ella de memoria, y rece todos los días
y tenga mucha fe y otros dones espirituales, si no tengo suficiente amor para sacrificar
algunos deseos personales por el bien de otros, mi supuesta espiritualidad no vale nada.
3 Y aunque tenga dos empleos para dar de comer a mi familia, contribuya a obras de
beneficencia y ofrezca ayuda voluntaria a toda labor comunitaria que se presente, si no
manifiesto amor y bondad a quienes me rodean, mi arduo trabajo y mis sacrificios
personales carecen de valor.
4 El amor tiene un día largo, fatigoso y desesperante en la oficina, y no reacciona con
brusquedad ni mal genio.
El amor participa de la alegría del que obtiene todas las oportunidades.
El amor no tiene que conducir el automóvil más llamativo, vivir en la casa más grande
ni disponer de los aparatos más avanzados.
El amor no siempre debe ser el jefe ni tener la última palabra.
5 El amor no es tosco ni grosero, y no refunfuña, ni trata de hacer sentir culpables a
los demás, ni los presiona para conseguir lo que quiere.
El amor está demasiado ocupado en atender las necesidades ajenas para pasar mucho tiempo
preocupándose por las propias.
El amor no se altera cuando las cosas no salen como él quiere.
El amor es rápido para creer lo mejor de las personas y lento para creer lo demás.
6. El amor detesta que le cuenten chismes. Solo quiere hablar de las buenas cualidades de
nuestros semejantes y lo bueno que han hecho.
El amor sabe que lo que escuche, observe y lea influirá en sus actitudes y acciones, y
por tanto, en los demás. Por eso, da mucha importancia a cómo emplea el tiempo.
7. El amor es flexible, se lo toma todo con calma, y puede hacer frente a todo lo que
surja.
El amor siempre está listo para dar a los demás un margen de confianza, y espera lo
mejor de ellos.
El amor quiere verlos desarrollar su plena capacidad y hace todo lo posible para que así
sea.
Al amor nunca se le agota la paciencia, ni siquiera con quienes son lentos para hacer su
parte o lo que les corresponda.
El amor no mira constantemente el reloj mientras otros hablan.
8. El amor nunca falla. Yo decepciono a otros, y otros pueden defraudarme. Todos metemos
la pata, nos equivocamos a veces o nos confundimos.
En muchos casos, nuestras palabras y actos se quedan cortos, y nuestras ideas luminosas no
siempre se interpretan de la manera que queremos o esperamos.
9. Somos humanos y fallamos, y con frecuencia somos insensatos.
Lo que entendemos del mundo en que vivimos, no digamos ya del mundo futuro, es parcial en
el mejor de los casos.
10. Pero cuando el Espíritu del amor de Dios vive en nosotros, lo cambia todo.
11. Aunque en realidad somos niños en cuanto a poner en práctica el verdadero amor, Dios
puede ayudarnos a crecer y abandonar nuestra conducta infantil.
12. Sin Él, no tenemos la menor idea de lo que es amar y de lo que más importa en la
vida. Sin embargo, cuando vivimos en Su reino -el reino de los Cielos, que según Jesús
está incluso ya dentro de nosotros- podemos ver desde la perspectiva de Él, tener bien
definidas nuestras prioridades, hacer uso de todos los recursos posibles y vivir y amar a
plenitud.
13. En la vida hay mucho de agradable y de bueno, ¡pero nada tan bueno e importante como
el amor!
El texto anterior está basado en la primera Epístola a los Corintios (Corintios 1, 13),
cuyo texto se indica a continuación.
1 Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo caridad, soy
como bronce que suena o címbalo que retiñe.
2 Aunque tuviera el don de profecía, y conociera todos los misterios y toda la ciencia;
aunque tuviera plenitud de fe como para trasladar montañas, si no tengo caridad, nada
soy.
3 Aunque repartiera todos mis bienes, y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo
caridad, nada me aprovecha.
4 La caridad es paciente, es servicial; la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa, no
se engríe;
5 es decorosa; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal;
6 no se alegra de la injusticia; se alegra con la verdad.
7 Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta.
8 La caridad no acaba nunca. Desaparecerán las profecías. Cesarán las lenguas.
Desaparecerá la ciencia.
9 Porque parcial es nuestra ciencia y parcial nuestra profecía.
10 Cuando vendrá lo perfecto, desaparecerá lo parcial.
11 Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño. Al
hacerme hombre, dejé todas las cosas de niño.
12 Ahora vemos en un espejo, en enigma. Entonces veremos cara a cara. Ahora conozco de un
modo parcial, pero entonces conoceré como soy conocido.
13 Ahora subsisten la fe, la esperanza y la caridad, estas tres. Pero la mayor de todas
ellas es la caridad.