Curiosidades de los juegos olímpicos

Oración olímpica

Cartel delos juegos olímpicos 2028

En la apertura de los Juegos Olímpicos de Helsinki, en 1952, delante de los 6.000 atletas pertenecientes a 70 naciones, entre ellos los 300 rusos, el arzobispo luterano de Helsinki leyó esta oración, que es todo un programa, no sólo deportivo, sino de vida:

Dios eterno y todopoderoso, nosotros, llegados de todos rincones de la tierra a esta gran fiesta común de las naciones, nos inclinamos ante Ti para darte gracias por tu protección y para rezarte. Une a todos los pueblos del orbe con el lazo de la paz y de la concordia.

Enséñanos a comprendernos, a tolerarnos, a amarnos los unos a los otros a pesar de todo lo que nos separa: fronteras, lenguas, opiniones, culturas y religiones.

Ayúdanos a que desaparezcan el odio y la discordia, y así llegue a ser verdadera esta palabra: "Que haya un solo rebaño y un solo pastor".

Mira a estas jóvenes y a estos jóvenes, que en el ardor y la fuerza de la juventud se preparan para competir por los laureles de la victoria; ayúdales a luchar también para guardar la pureza y para alcanzar la corona imperecedera de la eternidad.


Origen de la bandera de los juegos olímpicos

Uno de los principales emblemas del evento deportivo y un símbolo de la paz, los anillos olímpicos representan la unión de los cinco continentes (Oceanía, África, América, Asia y Europa) a través de la representación de cinco aros de colores diferentes entrelazados. El diseño fue concebido por Pierre de Coubertin, fundador del movimiento olímpico, que decidió utilizar estos colores (azul, amarillo, negro, verde y rojo) porque cada nación tiene al menos uno de ellos en su bandera.

La bandera olímpica, que está compuesta por los cinco aros sobre un fondo blanco, nació durante el Congreso Mundial de 1914, en París, pero no fue hasta la cita de 1920 en Amberes (Bélgica) cuando la izaron por primera vez de forma oficial. Desde entonces, se ha lucido en cada celebración olímpica.


La antorcha de los juegos olímpicos

La antorcha es uno de los principales símbolos de las Olimpíadas, junto con la bandera. Todo empieza meses antes de la celebración del gran evento en el Templo de Hera, en los restos arqueológicos de Olimpia. En una ceremonia que simboliza la conexión entre lo antiguo y lo moderno, se enciende una llama olímpica y con ello arranca el recorrido de la antorcha entre miles de personas hasta la ciudad sede, para que, en el día de la apertura, se realice el encendido del llamado pebetero olímpico.

De acuerdo con el protocolo, la llama debe seguir ardiendo durante toda la celebración del evento, hasta el día de la ceremonia de clausura, cuando se apaga para que el período olímpico se considere finalizado oficialmente.


Origen de los podios

La edición de 1912, que tuvo lugar en Estocolmo (Suecia), fue la que introdujo el podio en las ceremonias de entrega de premios. En las competiciones anteriores, los ganadores de cada una de las modalidades simplemente recibían sus medallas al mismo nivel que los otros competidores.

El ritual de subir al podio para recibir las medallas surgió para permitir una mejor visualización por parte del público y los medios de comunicación, convirtiéndose en un momento simbólico e icónico para muchos atletas. El nadador Michael Phelps, de Estados Unidos, es el que más lo ha hecho en toda la historia, ya que sumó un total de 28 medallas olímpicas (23 de oro, 3 de plata y 2 de bronce) en su carrera.


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