Te lo pedimos poniendo por intercesora a María, tu Madre, a quien él tanto amó en la tierra. Amén.

ALGUNOS FAVORES CONCEDIDOS

"Tenía una enfermedad semejante a un psoriasis, con picores horribles hasta sangrar, durante tres años. Agotada, me puse a invocar a Faustino. Un día que le rezaba, recibí una respuesta tan clara y precisa que lloré de alegría: Sí, curarás. ¿Cuándo? ¿Cómo? Tuve que esperar 6 meses. Entonces, habiendo tenido que ir a otro médico para otra enfermedad, aproveché para mostrarle esta llaga, incurable según el parecer de otros dos médicos. En una semana este médico consiguió curarme. Sin ese sí de Faustino a mi curación, me hubiera hundido en la desesperación. ¡Cuánto me ha ayudado Faustino con esa esperanza de admiración".

Mariana H. (Forbach, Francia)

"Una tía de Diego, entonces en cuidados intensivos, me pidió que fuera a esa familia que no conocía. (...) Rezamos el rosario y, al final, les hablé de Faustino, algo sobre su vida, su amor a la Virgen María y les dije: "Pidamos a Faustino que Diego se cure". Así lo hicimos y se lo pedimos. Les dije: "No me importa hacer el ridículo. Faustino no me puede hacer quedar mal. Él va a curar a Diego." Esas palabras salieron de mis labios antes de que yo me diera cuenta de lo que había dicho. (...) Durante la semana que Diego estuvo en cuidados intensivos había momentos de crisis y momentos de esperanza, pero seguía rezando. Hasta que me llamó mi amiga para decirme que se había despertado y que reconocía a su mamá. Poco a poco fue recuperándose. Así me pude convencer de que Faustino lo había sanado. Es ahora un niño completamente normal. (...). Esta experiencia ha sido para mí algo maravilloso.

OTROS FAVORES

Para leer más testimonios, accede a los boletines de Faustino